Me diréis, y tenéis razón, que muchas veces son las circunstancias de la vida las que nos empujan a tomar unas u otras decisiones pero, si lo pensáis bien, somos nosotros quien finalmente optamos por una cosa y descartamos otra.
Se acerca Navidad y me parece una muy buena oportunidad para proponeros un ejercicio relacionado con tomar decisiones. Como soy de las que todavía cree en la magia de estos días y en el espíritu navideño, he pensado que este es el mejor momento para probar algo que parece muy sencillo pero que pocas veces ponemos en práctica: Ser felices.
Os propongo que penséis en vosotros, en lo que queréis, en lo que necesitáis en este momento de vuestra vida; que penséis en las cosas que os llenan y os hacen felices.
Y que a partir de esta simple lista toméis decisiones.
Es un ejercicio fácil y veréis que la lista es más corta de lo que creíais:
Me hace feliz vivir experiencias nuevas,
conocer gente, rodearme de gente para compartir mi vida,
me gusta reírme y tener una buena conversación...
Si tu lista es parecida a la mía, te propongo que decidas hacer realidad las casas que te hacen felices;